PASATIEMPOS EN EL TIEMPO

Niños jugando en un árbol bajo un cielo con nubes
Niños jugando en un árbol

Los juegos infantilesrepresentan una manifestación de la imaginación y el entretenimiento que ha perdurado a través de las generaciones. En tiempos anteriores a la tecnología, los niños daban forma a mundos de fantasía en patios y calles, inmersos en actividades como saltar la cuerda, jugar al escondite o participar en la rayuela. La felicidad compartida y la amistad actuaban como motores impulsando sus travesías. La imaginación era la piedra angular, ya que los niños creaban reglas en el momento y convertían espacios simples en tierras de fantasía.

En la actualidad, la tecnología ha transformado la dinámica del juego. Los videojuegos, las redes sociales y los dispositivos móviles han abierto las puertas a una realidad virtual llena de estímulos, pero también de un cierto grado de aislamiento. Los niños se encuentran desconectados del contacto físico y de la naturaleza. Los juegos clásicos evocan sentimientos nostálgicos y ofrecen una perspectiva alternativa sobre cómo vivir la niñez.

No obstante, la llama de la creatividad sigue ardiendo. Los juegos de construcción y las simulaciones estimulan el razonamiento y el trabajo en equipo. El desafío radica en hallar el equilibrio entre el mundo digital y las interacciones en persona. Tanto educadores como padres buscan formas de combinar lo mejor de ambos universos: la ilimitada fantasía inherente a los juegos tradicionales y los beneficios educativos que la tecnología puede proporcionar.

En última instancia, los juegos de cualquier época reflejan la esencia misma de la infancia: la necesidad de explorar, aprender y divertirse. Los juegos del pasado mantienen viva la tradición y la camaradería, mientras que los juegos modernos abren nuevas fronteras en la forma en que los niños aprenden y se conectan. Una cosa es segura: sin importar la época, los juegos seguirán siendo un rincón sagrado donde los niños dan rienda suelta a sus sueños y curiosidad, creando recuerdos que perdurarán toda la vida.

¡Motivemos a nuestros niños y niñas a disfrutar de ambos mundos y proyectarse al infinito!

Aproximarse al juego tradicional es acercarse al folklore, a la ciencia de las tradiciones, costumbres, usos, creencias y leyendas de una región (Lavega Burgués, 1995).